De la mano de Califa Rojo nos adentramos en la esencia de lo que representa el outsider, con una ingenuidad escrupulosa y una sexualidad explícita que nos lleva al límite de la provocación donde su intención consiste en lograr una estética original, a la vez que expresar el derecho a ser diferente. Sus colores intensos y vivos dejan volar nuestra imaginación a través de ideas que surgen de la espontaneidad y no basados en técnicas artísticas concretas.
